Dibujando esta viñeta ⇑ , surgieron estas palabras de mi corazón:
¡Cuántas cosas nos tragamos!
Algunas hace mucho tiempo, tanto que ni recordamos el cuándo.
Las incorporamos como nuestras,
las interiorizamos
y asumimos como ciertas.
¡Cuántas cosas nos tragamos!
…
Y me pillo hablándome igual que me hablaron,
diciéndome aquello que me hizo tanto daño.
Hoy reviso en mi baúl de “Las cosas que me tragué”
Y envolviéndolas en lágrimas,
soy capaz de poner algunas fuera de mí:
De darles espacio. Forma.
En ese momento, me doy cuenta de que esto que estuvo dentro de mí tanto tiempo,
no era mío.
Mi tripa ha dejado de doler.
Adiós.
Besos, amor.
D.